Quizás nunca has pensado que puedes hacer maravillas con los restos de café. También puedes ahorrarte buen dinero usando estos restos, en vez de productos que prometen mil maravillas. Anímate chica y empieza a usar esas borras ya mismo.
No desperdicies las borras de café
Las borras del café son el residuo que queda en el filtro que se use para preparar el café y pueden ayudarte a ahorrar mucho dinero. Estarás ayudando a la capa de ozono, ya que estarás dejando de usar pesticidas que son perjudiciales para el medio ambiente y tu salud. Las borras pueden usarse en el jardín, para la limpieza en general, mejorar la apariencia de tu cutis y más. Tiene usos ilimitados.
Coloca café molido alrededor de la plantas para protegerlas contra plagas destructivas como las hormigas, caracoles, y babosas.
También funcionan como fertilizante. Mezcla las hojas secas, tierra seca, hierba seca, cascaras de frutas y vegetales que vayas a botar a la basura y borras de café, que servirá para neutralizar la acidez. Además, el café añade nitrógeno y potasio al suelo, así como magnesio, que todas las plantas necesitan para mantenerse sanas.
Los granos de café usados pueden ser utilizados de forma similar al bicarbonato de sodio para absorber olores de los alimentos en el refrigerador y el congelador. Sólo debes colocar un pequeño recipiente sin tapa en la parte trasera de la nevera. Déjalo en el refrigerador durante un par de semanas, mientras todavía tenga olor.
También puedes utilizar esas borras para exfoliar tu piel. Sólo tienes que aplicar los restos del café ya usado con un poco de agua caliente o aceite (¡el aceite de coco funciona muy bien!). Luego frota en la piel, de la cabeza a los pies, para deshacerte de células muertas.