En la actualidad, la mayoría de los niños están acostumbrados al uso de dispositivos móviles y la tecnología como forma de entretenimiento y aprendizaje.
Debido al gran avance de la tecnología los teléfonos celulares, tablets, videoconsolas y demás instrumentos electrónicos forman parte del día a día de los niños.
Pese a que el avance de la tecnología es un gran beneficio para el ser humano, ya que facilita la realización de ciertas labores y permite un alcance global de las comunicaciones, información, noticias y la cultura. También representa un estilo de vida adictivo, especialmente en el caso de los más pequeños de la casa.
Antiguamente la visita a los parques, bosques, jardines y demás espacios verdes eran una rutina común entre padres e hijos durante fechas especiales o fines de semana como una forma de entretenimiento, juego, interacción y de diversión.
Sin embargo durante los últimos años, se ha visto una tendencia por parte de los más jóvenes a permanecer dentro de casa frente al televisor, computadora, teléfono celular o tablet antes que salir a disfrutar del aire libre.
Esto se traduce en un incremento del sedentarismo infantil, dado que prefieren pasar largas horas al día frente a una pantalla que convivir, jugar y divertirse junto a otros niños. De esta forma lentamente se perjudica la salud mental y física de los más jóvenes de la casa.
Ya que adoptan posturas erróneas, hábitos nocturnos no recomendables y una preocupante adicción a la tecnología que limita sus relaciones sociales. Una preocupante situación en el comportamiento de los jóvenes que el autor Richard Louv destacó en su libro “El último niño en el bosque”.
En su obra, describió los efectos negativos que produce la permanencia de los pequeños dentro del hogar. Una decisión que puede convertirse en una amenaza para la salud física y psíquica de los menores, en un padecimiento que el autor nombró como déficit de naturaleza.
La importancia de la naturaleza en la vida de los niños
Aunque el diagnóstico de Louv no tiene certificación médica, el escritor afirma que los niños que presentan una falta interacción con la naturaleza manifiestan una importante reducción en su creatividad, imaginación, habilidad de aprendizaje e incluso en su capacidad de asombro.
Louv enfatizó la importancia de la naturaleza en la vida de los niños ya que aunque su contacto no es una cura mágica para todos los males, si es una herramienta vital para el desarrollo de las habilidades de los más pequeños.
Dado que cuando los jóvenes juegan al aire libre suelen desarrollar un mayor sentido de la imaginación, la cooperación, del compañerismo, la igualdad e incluso de la reflexión. Ya que el contacto con la naturaleza le brinda una sensación de libertad, disfrute y alegría que no puede compararse con el de un dispositivo electrónico.
“Diversas investigaciones lo relacionan con una reducción de los trastornos por déficit de atención, del estrés y de la depresión. Incluso con un mejor desarrollo cognitivo. Además, lógicamente, es un importante antídoto contra la obesidad.”
Al salir a jugar con frecuencia a los parques o bosques de forma inconsciente se realiza una actividad física, que beneficia la salud y la motricidad de los más jóvenes. Siendo una forma fácil de introducir a tus hijos al ejercicio y los deportes, contribuyendo a su salud física incluso a futuro.
Louv señaló que el distanciamiento de los niños hacia la naturaleza se debe a diferentes razones entre las cuales los padres juegan un papel importante. Debido a que frecuentemente utilizan la tecnología como método de entretenimiento para sus hijos durante un largo periodo de tiempo sin la necesidad de vigilar constantemente como lo harían al salir aire libre.
Es por ello que es importante que los propios padres comprendan los beneficios de la naturaleza en sus hijos y que se aseguren de brindar un tiempo de contacto con el medio ambiente. “Así como apuntamos en el calendario el partido de fútbol de nuestros hijos, también podemos apuntar eventos naturales: un paseo, una excursión”.
A su juicio la tecnología no es un factor negativo si se utiliza de forma correcta y en la medida adecuada especialmente en el caso de los niños. Ya que es una herramienta útil, pero no es la responsable del cuidado de los hijos y las experiencias que otorga suelen ser limitadas hasta cierto punto al comparase con los beneficios de salir a jugar al parque con los padres o amigos.