Dulce y Deliciosa: Cómo Hacer Mermelada de Naranja en Menos de una Hora

La mermelada de naranja es una de esas delicias caseras que pueden transformar un simple desayuno en una experiencia memorable. Con su equilibrio perfecto entre lo dulce y lo cítrico, esta mermelada es un verdadero tesoro en cualquier despensa.

Y lo mejor de todo, ¡puedes hacerla en menos de una hora en tu propia cocina! Sigue estos pasos detallados para crear tu propia mermelada de naranja casera y disfrutar de su sabor fresco en cualquier momento del día.

Ingredientes:

  • 1 kg de naranjas frescas
  • 500 g de azúcar blanco
  • 1 limón (opcional, para agregar un toque extra de acidez)
  • Frascos de vidrio esterilizados con tapa hermética

Instrucciones:

  1. Preparación de las naranjas: Comienza lavando cuidadosamente las naranjas bajo agua corriente para eliminar cualquier suciedad o residuo. Luego, con un rallador fino, pela la cáscara de las naranjas, procurando evitar la capa blanca que puede ser amarga. Una vez peladas, corta las cáscaras en tiras finas o en trozos pequeños, según tu preferencia. Después, exprime las naranjas para obtener su jugo fresco y cuela cualquier pulpa o semillas.
  2. Cocción inicial: En una cacerola grande, combina el jugo de naranja, las cáscaras ralladas y el azúcar. Si decides utilizar el limón, exprímelo y agrega su jugo a la mezcla. Remueve bien para asegurarte de que el azúcar se disuelva completamente. Lleva la mezcla a ebullición a fuego medio-alto, y una vez que hierva, reduce el fuego a medio-bajo para mantener un hervor suave y constante.
  3. Cocinar a fuego lento: Deja que la mezcla de naranja y azúcar hierva a fuego lento, removiendo ocasionalmente para evitar que se pegue en el fondo de la cacerola. Cocina la mermelada a fuego lento durante aproximadamente 30-40 minutos, o hasta que haya espesado y adquirido una textura similar a la de la mermelada. Durante este tiempo, puedes retirar la espuma que se forma en la superficie de la mermelada con una cuchara.
  4. Prueba de la consistencia: Para asegurarte de que la mermelada esté lista, realiza una prueba de consistencia. Coloca una pequeña cantidad de mermelada en un plato frío y deja que se enfríe durante unos segundos. Luego, pasa el dedo por la mermelada enfriada: si se forma una arruga en el medio y no se desliza fácilmente, ¡tu mermelada está lista para envasar!
  5. Envasado: Retira la mermelada del fuego y déjala reposar durante unos minutos. Mientras tanto, prepara tus frascos de vidrio esterilizados y sus tapas herméticas. Vierte la mermelada caliente en los frascos, llenándolos hasta aproximadamente 1 cm del borde. Asegúrate de limpiar cualquier derrame en los bordes de los frascos antes de cerrarlos herméticamente. Deja que los frascos se enfríen completamente a temperatura ambiente antes de almacenarlos en un lugar fresco y oscuro.

¡Ahora, tu deliciosa mermelada de naranja casera está lista para disfrutar! Úsala para acompañar tostadas, mezclar con yogur o incluso como relleno para pasteles y postres.

Con su frescura y sabor natural, esta mermelada seguramente se convertirá en un favorito en tu hogar. ¡Disfruta!

Acerca del autor

Pedro Gutierrez

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