En gran mayoría de los hogares existe algún miembro de la familia que es reconocido como la oveja negra por su rebeldía y diferencia de los demás.
Ser la oveja negra dentro de un grupo significa que eres la persona rebelde que no encaja con los pensamientos comunes que comparten los demás. Esto incluye moda, estilo de vida, puntos de vista o ideas que te hacen un individuo extraño o raro para otros individuos.
Si eres la oveja negra entre tus amigos o familiares, no dejes que eso te desanime, ya que entre tus diferencias se encuentra tu verdadero ser. Después de todo, al ser rebelde demuestras tu tenacidad y determinación, de perseguir un camino que para otros, es inimaginable.
Al ser fiel con tu personalidad, sentimientos, forma de pensar y de actuar, lograrás abrir tu propio camino por la vida. Sin duda, una decisión que no todas las personas se atreven a tomar, debido a la importancia de la aceptación de otros individuos.
Ser la oveja negra no representa un defecto
Para muchas personas, comportarse como lo establece la sociedad y las personas del entorno, es lo normal y lo que cualquier persona debe hacer sin dudar. Sin embargo, existen individuos únicos y rebeldes que buscan encontrar la ruta alternativa que les permita obtener su libertad e individualidad.
Estas personas tienden a ser catalogadas como la oveja negra del grupo como una forma de destacar su diferencia de otras personas. Si alguna vez recibiste este titulo, debes ser consciente que no siempre posee un significado negativo. Ya que es un claro reconocimiento de tu tenacidad para enfrentarte a las reglas de otros.
Incluso hay quienes afirman que la oveja negra representa a aquellas decisiones que otros miembros de la familia no se atrevieron a intentar. Lo cual genera en tus padres, tíos o abuelos, sentimientos de admiración, envidia, rechazo, aprobación o apoyo. Ya que conocen o desean estar en tu posición de rebelde ante la corriente común de la sociedad.
No olvides compartir con tu familia y amigos.