Al buscar una relación sentimental, muchas personas tienden a idealizar el romance, esperando encontrar a la pareja perfecta para una vida feliz.
Esta idealización de la relación de parejas, el noviazgo y el matrimonio, lleva a que la búsqueda del amor, se dificulte, debido a las altas expectativas propias.
Esta forma de pensar puede brindar resultados positivos pero también negativos, dado que se persigue una ilusión típica de los cuentos de niños. Donde las relaciones de pareja no experimentan dificultades, tristezas, desilusiones, fracasos o problemas, sino pura felicidad y amor.
Una errada concepción de la relación de parejas, que aplicada a la vida real, resulta completamente de fantasía. Especialmente considerando que cada individuo posee sus propios pensamientos, sentimientos, opiniones y filosofía. Los cuales no siempre son compartidos o comprendidos por la pareja.
Esto representa un gran problema para las personas que persiguen una relación perfecta digna de revista. Debido a que a diferencia de las parejas ficticias, la suya se enfrenta a las dificultades, diferencias de opiniones e incluso a la separación.
Olvídate de una relación perfecta, y busca quien luchar y reír junto a ti
Es precisamente por ello, que es necesario abrir los ojos y olvidar esa concepción equivocada de las parejas y de las relaciones. En la vida no existen príncipes azules ni princesas que deban ser rescatadas, sino hombres y mujeres que buscan un amor que les llene el alma.
Deja de lado los cuentos para niños y mejor busca un compañero de vida con el que puedas compartir, reír, llorar, amar y hablar sin miedos ni remordimientos. Con quien puedas discutir, dialogar, confiar y que te brinde energía, motivación, apoyo y seguridad, así como tú a él.
Una verdadera relación no depende únicamente de los regalos, las cenas románticas y los costosos arreglos florales. Su fortaleza recae en las personas que forman parte de la pareja, en sus esfuerzos, sacrificios, determinación, voluntad, pasión y deseo de cuidar, amar y proteger al otro.
Se trata de dos personas enfrentándose juntas ante todas las dificultades y desafíos que la vida les presente, siendo el mayor apoyo y respaldo uno del otro. Compartiendo su fortaleza, fuerza y energía, siendo capaces de levantarse juntos aunque hayan recibido un fuerte empujón por parte del destino.
Este tipo de relación es difícil de encontrar, dado que no todas las personas están dispuestas a brindar toda su alma y corazón a una pareja. Sin embargo, cuando encuentres a tu verdadero compañero de vida, percibirás la vida de forma diferente.
Al tener a tu lado a alguien capaz de pararse a tu lado y hacerle frente a todos los problemas y retos, sin desfallecer. Alguien que te brinda su corazón, alma y cuerpo con la misma entrega que tú lo haces. Quien te entiende, escucha y dialoga sin huir ni abandonar dicha relación, que es tan importante para ambos.