Recientemente la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestre (CITES), estableció una medida de protección para las jirafas
Mediante esta decisión se prohíbe de forma definitiva la comercialización de la especie a nivel internacional. Siendo este un avance en la conservación y protección de estos hermosos animales.
De los 183 países participantes en la convención, 106 votaron a favor de establecer una restricción sobre el comercio de las jirafas vivas. Una decisión que sin duda, brinda una nueva herramienta para la protección de estos animales. Especialmente considerando que durante las últimas décadas se ha registrado una reducción de entre el 30 y el 40% de su población en el mundo.
A partir de ahora, cualquier intento de comercio de esta especie, deberá contar con un permiso especial otorgado por las autoridades pertinentes. Para la aprobación de una excepción, se deberá probar que esta exportación o reexportación, no representa una amenaza para la especie.
La solicitud de esta restricción dividió al continente africano, dado que países de África central y occidental, se mostraron preocupados por la reducción acelerada de la población en el continente. Mientras que las naciones del sur (Botsuana, Mozambique, Namibia, Sudáfrica, Tanzania, Zambia y Zimbabue), defienden sus logros en la conservación de la especie.
Lentamente la conservación se vuelve una realidad
Una aterradora predicción advertía sobre la reducción de la población de las jirafas en el continente a tan solo unos 50.000 ejemplares. Sin embargo, la aplicación de esta restricción podría generar un cambio para este destino afirmó el jefe de la Secretaría que gestiona el CITES, Thomas de Meulenaer.
El funcionario destacó especialmente el rol del ser humano en la drástica reducción de la especie. Y es que durante los últimos años, se evidenció un incremento de la población humana en el continente. Llegando a habitar en territorios que originalmente formaban parte del habitad natural de la jirafa. Además del aumento en la práctica de la caza, por carne, cola, piel y como trofeos para los cazadores.
Una opinión dividida para preservar las jirafas
Los países africanos que solicitaron establecer una restricción al comercio de estos animales, expresaron su preocupación y temor por los pocos ejemplares que quedan en el continente. Por lo que consideran que esta medida de protección, será vital para lograr una recuperación de la especie.
Mientras que los países del sur, lucharon por evitar la restricción, al afirmar que la población de jirafas, al contrario de lo que se cree, ha logrado aumentar en los últimos años.
Pese a dicho argumento el CITES se negó a permitir la existencia de excepciones a la medida. A lo que el grupo de países respondió dejando clara su intención de discutir la medida. Un delegado de Tanzania manifestó su rechazo a la decisión, la cual considera que no posee bases científicas, además de negar el esfuerzo de las naciones en materia de conservación.
Ante este escenario tan dividido, solo queda esperar que las naciones puedan establecer un acuerdo ante la medida de protección y realmente se ocupen del resguardo de estos hermosos animales.