Este pequeño animalito es el único que se come el plástico, por lo que es una excelente oportunidad para biodegradar el plástico de la Tierra.
El plástico es un material que para nuestro planeta Tierra puede no ser tan bueno debido a los componentes que este material tiene, los cuales resultan altamente tóxicos para nuestro suelo o incluso para nuestros mares.
En vista de esto son muchos los avances e investigaciones que se han realizado para que el plástico de un momento a otro deje de contaminar nuestros mares y nuestros suelos y afortunadamente hemos escuchado muy buenas noticias.
Como ya lo sabes las sustancias toxicas afectan de una manera terrible nuestra salud y por ende también la de los demás seres vivos que habitan en nuestro planeta incluso a las plantas y esto no es lo más correcto sin embargo aún hay esperanza.
Seguramente creías que los insectos solo estaban para fastidiarnos sin embargo esto no es así, los gusanos nos pueden ser de mucha ayuda cuando de eliminar el plástico se trata y en este post nosotros te hablaremos de ello.
Biodegradar el plástico rápido es posible
Una de las preocupaciones más grandes del planeta es el plástico ya que este material además de contaminante tarda un aproximado de 240 años para degradarse y cada vez esto avanza más y más dañando el planeta y es que para que te imagines la magnitud del problema te decimos que los humanos producen unas 300 millones de toneladas métricas de plástico.
De todas estas toneladas al menos 12 millones de ellas terminan en el océano, contaminándolo y la otra mitad termina en vertederos lo que preocupa ya que no hay una manera sustentable para eliminarlo pero ahora se ha descubierto algo importante.
En España e Inglaterra se descubrieron que las larvas de la gran polilla de la cera pueden ser la salvación para esto ya que degradan de una manera increíblemente eficiente el polietileno que es casi la mitad de los componentes de los plásticos.
Para comprobar esto se colocaron cien de estas larvas en una bolsa de polietileno y en un lapso de 12 horas ya los gusanos se habían consumido al menos 92 miligramos de esta bolsa y otro experimento consistió en moler algunas larvas y luego esta pasta se aplicó en películas de plástico y en 14 horas el 13% de la masa ya había desaparecido gracias a las enzimas del estómago de los gusanos.
Una científica microbióloga que no participó en este estudio, Jennifer DeBryun, de la Universidad de Tennessee dice que es de esperar que este organismo haya desarrollado la capacidad de degradar el polietileno sin embargo comparado con los estudios previos la rapidez de degradación es impresionante.
Esto es un increíble descubrimiento sin duda alguna.