Una hembra de crustáceo que resultó atrapada en un trozo de ámbar tras reproducirse posee en su interior a los espermatozoides más antiguos de la historia del mundo.
Se estima que los espermatozoides dentro de la hembra de ostrácodo posee al menos unos cien millones de años desde el momento en el que quedó congelada en el tiempo.
Los ostrácodos son una especia de crustáceos cuyo tamaño es similar al de una semilla con patas, sin embargo, algunos especímenes posee un esperma gigante. El cual se puede estirar hasta alcanzar 1.18 centímetros, triplicando la longitud que posee un adulto de la especie.
Un increíble dato que se descubrió en una reciente colección de ostrácodos conservados en ámbar. Entre los cuales se encontraba una hembra que se había reproducido antes de quedar inmortalizada en el tiempo y que hoy en día permite observar dichos espermatozoides de 100 años de antigüedad.
Los espermatozoides más viejos de la historia
El estudio publicado por la revista “Proceedings of the Royal Society B.” señaló que los espermatozoides fosilizados son los más antiguos jamás encontrados por el hombre. Y su data se estima hacia la época en la que los dinosaurios transitaban por la Tierra.
Mediante micro tomografías computarizadas los investigadores lograron identificar en solo una pieza de ámbar a 39 ostrácodos, entre ellos la recién descubierta especia “Myanmarcypris hui”. Además de observar detalladamente el interior de algunos de estos crustáceos que se encontraron inmortalizados en Myanmar.
De acuerdo con los expertos, los descubrimientos de la investigación superaron las expectativas del proyecto. Dado que solo esperaban aprender más sobre la especie y su organismo. Sin embargo, la presencia de los espermatozoides en una de las hembras resultó en una increíble sorpresa para los investigadores y la ciencia.
“Sabíamos al mirar la pieza de ámbar con un microscopio óptico ordinario que había antenas y patas que sobresalían del caparazón, así que teníamos la esperanza de encontrar órganos internos. Pero lo que vimos… superó las expectativas»
El hallazgo de espermatozoides antiguos conservados en buenas condiciones es un evento de gran valor para la humanidad, ya que es una tarea difícil de completar sin dañar los tejidos y muestras.
Y aunque su descubrimiento se compara con los espermatozoides fosilizados encontrados en los grillos del período Cretácico. Los científicos afirman que la muestra dentro de la hembra ostrácodo es «el esperma de animal fósil inequívoco más antiguo».