El poder de la paciencia consiste en poder frenar a la mente que, en ocasiones, va más rápido de lo que imaginamos. Ahí es cuando debemos alimentar la visión positiva mientras se cultiva la capacidad de espera.
El permitir una costumbre nueva donde podamos dejar atrás cualquier presión, ansiedad y preocupación donde las cosas puedan suceder a su ritmo, momento y tiempo.
Expertos aseguran que decidir si la impaciencia responde a un patrón de conducta adquirido o a un rasgo innato que poseen algunas personas al nacer. Pero, nuestro contexto social asegura que es un estado de insatisfacción donde, constantemente, queremos vivir en la inmadiatez.
Entonces, al momento de experimentar la dificultad para tolerar la espera y esa impaciencia constante al percibir que no todo puede estar bajo nuestro control.
Aunque, es importante hablar de la impaciencia que lleva a la ansiedad, o si la ansiedad es la que nos lleva a seamos menos tolerantes. Pero como no estamos seguro de esto, solo podemos asegurar que ambas dimensiones hacen un equipo perfecto, para generar estrés o sobreactivación de nuestro cerebro.
Para un mejor calidad debes tener el poder de la paciencia
Veamos la impaciencia como un malware que es instalado en nuestra mente y que ayuda a activar nuestro mecanismos de las distorsiones cognitivas.
Ten presente que ese veneno no solo distorsiona los pensamientos, también llega a afectar nuestro ánimo. Por lo tanto, la paciencia es un mecanismo más que idóneo para poder tener el control de nuestros pensamientos y acciones.
Cuatro raíces que nos permiten entrenarla
Sin duda, el poder de la paciencia ayuda a clarificar las ideas sobre cualquier dimensión. Por eso, recomendamos que entrenes estas cuatro raíces para que puedas manipular tu vida y, sobretodo, tus pensamientos.
- La liberación es tener la paciencia suficiente.
- Cuando somos compasivos, estamos practicando la paciencia.
- El movimiento y la acción son manipulados por la paciencia.
- Si tienes confianza u optimismo, las semillas de estas serán más efectivas.
Recuerda que la paciencia es una fuerza que necesita mucha concentración. Es una virtud que ciertas personas tienen, ayudándolas a gestionar sus pensamientos y emociones.
Trata de practicarla y verás como cambiará tu vida.