Un padre malhumorado la mayor parte del tiempo no solo refleja una falta de control en cualquiera de nuestras emociones. Además, genera ese efecto negativo en el desarrollo cognitivo y emocional de sus hijos.
Los gritos ya sea por violencia o sin causa generan un efecto muy fuerte en los niños. Esta euforia manifestada o expresada a través de gritos, ya sea por un equipo de fútbol acaba de anotar un gol puede tener el mismo efecto que los alaridos en una discusión de pareja.
Junto con los comportamiento cargados de ansiedad que poseen efectos similares en los más pequeños.
La edad más vulnerable de los niños ante este tipo de conductas se encuentra entre los cero y los tres años. El mal humor de un padre ya que suele traducirse en un sentimiento de culpa en los hijos. Por lo que, lo s niños pueden llegar a sentirse responsables por la falta de control emocional de los padres.
Efectos de tener un padre malhumorado
Con el paso del tiempo, los niños de un padre malhumorado llegan a desarrollar problemas de inseguridad, angustia y estrés. Por lo que afectará la evolución cognitiva, emocional y lingüística, al igual que las habilidades para poder socializar.
Aunque el mal humor actúa como una epidemia y no tarda en extenderse en toda la familia. Convirtiéndose en un estilo de vida que se repite en forma de círculo vicioso.
El mal humor del padre genera en el hijo una tensión adicional. Cada exigencia son una fuente de tensión para el niño, de manera que tendrá que lidiar con dos fuertes demandas de manera simultánea.
Además, con esa necesidad de responder a cada una de las obligaciones, es difícil que el pequeño alcance sortear todo esto de manera adecuada.
Algunas recomendaciones
Los niños con padres que poseen esta características replican este comportamiento con efectos nocivos a largo planto, ya que puede generar depresión y serios problemas de aprendizaje y lenguaje.
Por eso, te dejamos algunas recomendaciones:
- Tratar de mantener una relación fuerte con tu pareja.
- Cada responsabilidad posee la misma importancia y dedicación.
- Mantente atento a cualquier signo que puede llegar desestabilizar tu ánimo y de quien te rodea.
Todos los padres buscan que sus hijos sean felices. De seguro este también es tu objetivo. Para ello, intenta ofrecerle tiempo de calidad, acércate a ellos y no olvides recordarles lo mucho que los quieres.