El estrés es un estado generado por las diversas situaciones del entorno que generan un efecto negativo sobre la salud mental de adultos e incluso en los niños.
Contrario a la creencia popular, los adultos no son los únicos con la posibilidad de padecer estrés, ya que tanto los niños y jóvenes, pueden presentar signos de esta reacción natural del cuerpo humano ante las situaciones de presión.
Precisamente debido a la necesidad de encontrar formas que ayuden a los más pequeños de la casa a liberar el estrés de sus vidas. Es que en 2015, la Universidad Estatal de Washington realizó un estudio sobre la interacción entre caballos y 130 niños y jóvenes.
Los resultados de la investigación revelaron que el nivel de estrés de los participantes, se redujo de forma increíble tras entrar en contacto con los majestuosos caballos.
El estudio afirma que la interacción entre las personas y lo equinos tiende a generar un cambio en los niveles de cortisol, es decir, en la hormona del estrés en los niños y jóvenes.
La investigación además demostró que los patrones saludables en el cortisol puede combatir el desarrollo de diversos problemas de salud, a nivel físico y mental.
Los animales pueden ayudarte con el estrés
A diferencias de otros estudios enfocados en los beneficios que representan los animales de compañía para la autoestima y comportamiento de los niños. Esta investigación analizó la forma que en funciona la hormona del estrés.
De esta forma, se puede evidenciar que las diversas situaciones que cada individuo enfrenta en su vida diaria, pueden generar diversos niveles de estrés. Teniendo en cuenta, el estado emocional, la salud física y mental y el cómo se percibe cada situación estresante.
Por ejemplo, un niño reaccionará de forma distinta y sentirá distintos niveles de estrés, al enfrentarse con un animal pequeño, en comparación con otras especies más grande como los caballos.
Para analizar esta situación, el programa de estudio otorgó clases básicas sobre la equitación y el cuidado de los caballos a los jóvenes participantes. Quienes a cambio otorgaron seis muestras de saliva dos días antes y después de las 12 semanas del programa para medir el nivel de cortisol.
El resultado mostró que los participantes del estudio, poseían niveles de cortisol más bajos durante el día y en la tarde en comparación con otros niños. Lo que confirma que la interacción entre los jóvenes y los caballos, sirve como terapia para ayudar a liberar el estrés de los más pequeños.