El distanciamiento afectivo no sube de un de un día para otro.
Generalmente, las personas acumulamos un exceso de decepciones, palabras mal dichas, silencios que enfriaron emociones y comportamiento inadecuados. Todas estas acciones pueden darse en cualquier miembro de la familia y dejar heridas abiertas.
Posiblemente, nosotros mismos hemos vivido una realidad con más de un miembro cercano. La distancia física y emocional, se da con más frecuencia de la que se piensa. Son muchos los hogares que cuentan con algún miembro familiar ya que no viene de visita y que no felicita en días de aniversario.
Muchas personas ven estoy como natural. No es fácil llevarse bien con todas las personas que conforman el grupo familiar. Sin embargo, esta situación resulta un poco mas problemática cuando surge entre los hijos y los padres.
Aunque ya se tenga claro que los lazos de sangre no aseguran el afecto, ni llegan a ser imposición alguna para seguir manteniendo ese vínculo, dicha situación puede vivirse con cierta tristeza en algunas de las partes.
Distanciamiento afectivo: ¿cuáles son las causas?
El distanciamiento afectivo de la familia es un tema bastante descuidado en la literatura de la investigación. Estas situaciones se dan con bastante frecuencia y que se dan en mayor grado entre primos, sobrinos y tíos.
Sin embargo, las dinámicas que se forjan en un hogar y entre un grupo de personas llegan a ser muy complejas. El médico Salvadfor Minuchin, decía que crecer y madurar es aprender a separarse. Aunque, hay separaciones que se dan de manera dolorosa y hasta distorsionada creando heridas imborrables.
Situaciones traumáticas y distanciamento afectivo en la familia
Hay otro factor decisivo en el origen del distanciamiento afectivo familiar, los cuales son los traumas. Esto es el abuso físico o psicológico, maltrato, consumo de alcohol, drogas y las dinámicas que se crean durante estas situaciones que a menuda explican la ruptura paulatina del vínculo.
Tal y como podemos ver, son muchos los desencadenantes de esta ruptura entre las parejas de un miembro familiar. Aunque se puede destacar, que el alejamiento sea en ocasiones necesario y la sociedad sigue viendo ese hecho con muy malos ojos.
Distanciamiento afectivo: Comportamientos que arruinan relaciones
Padres autoritarios, hijos egoístas, madres frías y comportamientos impulsivos en un hogar, pueden conjugarse infinitas dinámicas insalubres, muchas de ellas ocasionadas por trastornos psicológicos no diagnosticados.
Al igual que otros estilos de la personalidad que chocan entre ellas por décadas. Esta variedad de carácteres va creando posos, abriendo heridas que no cicatrizan y haciendo la convivencia insufrible. Por lo que este distanciamiento, se hace más patente y mucho más visible.
Hijos dejan el hogar y espacian las visitas y el contacto hasta que llega un momento en el que ese vínculo se desata para siempre. Por lo que, se puede experimentar alivio por esa distancia, por no tener que verse en situaciones dolorosas y problemáticas.
Sin embargo, a pesar del silencio en la comunicación, así que sigue pesando la sombra de la tristeza y decepción.
Diferencias en valores diferentes
Las mejores familias no son las que coinciden en todo, sino que a pesar de las múltiples diferencias, se respetan. A pesar de que no es algo que se dá muy a menudo. El origen de muchos distanciamientos ese originan por el choque de valores y expectativas que son irreconciliables.
Hay padres que siembran en sus hijos unas elevadas expectativas e hijos que no llegan a encajar en las visiones particulares de los progenitores.
En fin, la familia se sigue concibiendo como la situación más sagrada cuando en ocasiones, puede ser el escenario y origen de cualquiera de nuestra infelicidad.