El hígado es el órgano cuya fuerza probamos literalmente todos los días. Comida chatarra, alimentos grasos, alcohol, analgésicos, etc. Por lo que, ayudar al hígado a recuperarse después de vacaciones, es un deber más que una opción.
Cualquier parte de nuestro cuerpo en tales condiciones se habría ido a la huelga hace mucho tiempo, sobre todo después de prolongadas vacaciones con excesos. Pero el hígado es capaz de restaurarse incluso luego de graves sobreusos y daños. Sin embargo, esto no significa que los recursos para restaurar el hígado sean infinitos.
En Ignisnatura hemos recopilado las formas de ayudar al hígado a recuperarse más rápido después de unas vacaciones sobrecargadas de excesos.
1. Deja el alcohol
Permanentemente o al menos, por un rato.
El alcohol es uno de los destructores más poderosos del hígado. Si bebe demasiado, el etanol destruye las células del hígado y, en su lugar, forma áreas con tejido cicatricial: así es como comienza la cirrosis.
Por lo tanto, es extremadamente importante, en primer lugar, no beber más que una cantidad consciente y saludable, para que el hígado tenga tiempo de procesar el alcohol sin descomponerse.
En segundo lugar, es necesario para iniciar el proceso de reparación celular, darle un descanso al menos durante unos días al hígado, que es un órgano esencial para tener óptimas condiciones de vida.
Idealmente, el alcohol debe evitarse por completo. Recuerde: no existe una dosis de alcohol completamente segura. Incluso una pequeña cantidad es perjudicial para la salud.
2. Lleva una dieta equilibrada
Expertos de la Fundación Americana del Hígado recomiendan renunciar a la comida enlatada, la comida rápida, las carnes ahumadas, los encurtidos, la carne grasosa, el arroz blanco, el pan blanco y los dulces. Idealmente, de nuevo, para siempre. Si no eres capaz de ese heroísmo a largo plazo, sigue una dieta saludable para el hígado durante al menos 5 a 7 días.
La dieta debe incluir:
- fibra: frutas frescas, verduras, panes y cereales integrales, cereales
- carne magra, preferiblemente no roja
- productos lácteos, incluyendo leche y quesos bajos en grasa
- nueces y semillas
- pescado
- aceite vegetal.
3. Mantente hidratado
Se necesita agua para acelerar la recuperación del hígado. Normalmente, diariamente el cuerpo debe ingerir:
- Aproximadamente 3,7 litros de agua – si es hombre;
- Aproximadamente 2,7 litros de agua – si es mujer.
Sería muy positivo para la salud si obtiene el 80% de esta cantidad con cualquier bebida, incluida la leche, los jugos de frutas, el té, las sopas líquidas y el 20% en forma de alimentos sólidos (verduras o frutas jugosas).
4. Evita las toxinas
No fume y trate de no estar en áreas con humo. El olor a pintura, cloro, limpiadores y detergentes también es toxico. Sentir olores como estos es señal que debe salir lo antes posible del lugar o ventilar la habitación.
5. Sal más al aire libre
La actividad física mejora los procesos metabólicos en el cuerpo y ayuda al hígado a recuperarse más rápido.
6. Ejercicio
Esto ayudará a normalizar el peso, evitar la obesidad y las enfermedades hepáticas asociadas a ella. Por ejemplo, el ejercicio puede evitar que adquiera la enfermedad del hígado graso no alcohólico (NAFLD, por sus siglas en inglés), uno de los diagnósticos más comunes en hepatología.
7. Toma café
Inesperado, pero cierto: a los amantes del café con menos frecuencia se le producen fibrosis, cirrosis, enfermedad del hígado graso no alcohólico e incluso cáncer.
Los médicos aún no han decidido cuánto café al día necesita beber para obtener un efecto curativo o depurativo. Se supone que una o dos tazas de café es más que suficiente.
Sí, el café no es para todos. Los niños, los adolescentes, los ancianos y las personas con presión arterial alta pueden verse perjudicados por la cafeína. Por lo tanto, antes de decidirse por la «cafeterapia» como parte de una limpieza del hígado, consulte con un médico.
